LOS HOMBRES CON SOMBRERO

¿Os suena esta imagen?. Es Abraham Lincoln con su famoso sombrero. Hoy voy hablar de ese accesorio masculino que vuelve a estar de moda este otoño cada vez con más fuerza, el sombrero, muy utilizado durante los meses de verano para protegerse del sol, pero cada vez más con la llegada del frío.

El uso del sombrero se remonta a la Antigua Grecia para protegerse del sol y la lluvia, el gorro frigio (similar al gorro de los pitufos).

Ya en el siglo XIV se empezó a utilizar en Europa para revelar un estatus social y cultural durante el Renacimiento. Las clases sociales altas se hacían distinguir con grandes y vistosos sombreros, fabricados con terciopelo y con adornos como plumas y piedras preciosas. Por otro lado estaba el pueblo que usaba capuchas o sombreros austeros y pequeños. 

Fuera de Europa, a partir del sigo XVI, la moda en sombreros era totalmente diferente, todos conocemos la películas del oeste, vaqueros encima de caballos con sus sombreros de copa alta y ala ancha, la prenda que define la vestimenta del vaquero norteamericano, más conocidos como cowboy (encargado de la tareas relacionadas con la ganadería).

Fabricados de fieltro, a base de pieles, paja o cuero. Se caracterizan por una corona alta, redondeada, de ala ancha y plana, con una banda decorativa.

De nuevo en Europa. En el siglo XVII, Francia se convierte en el centro de moda europeo. En esta época se pusieron de moda junto a los sombreros extra grandes, las pelucas, una tendencia iniciada por Luis XIII. Los sombreros fueron evolucionando, cambiando su forma, en el siglo XVIII, los sombreros eran más sencillos y sin uso de pelucas. Predominó el estilo tricornio, ala del sombrero plegada alrededor de la cabeza y formando dos puntas. 

El sombrero masculino seguía siendo muy sobrio. En el siglo XIX se puso de moda el sombrero de copa alta (chistera o galera) con copa recta y ala corta. 

Durante este siglo también destacó otro estilo de sombrero, el bombín, con copa redondeada y ala corta. Estos avances, en los modelos de sombrero, tal vez se debieron a la creación de la maquina de coser, lo que permitió una masiva producción, siendo un producto utilizado por muchos hombres de la época.

             

CHISTERA                                            BOMBÍN

A partir de los años cuarenta del siglo XX,  desciende notablemente el uso de este accesorio, quedando reservado prácticamente a la protección frente a la exposición al sol y en actos de rigurosa etiqueta. La razón es la apuesta por lo cómodo y lo práctico que se impuso a mediados del siglo XX.

Destaca un llamamiento del diseñador Christian Dior en los años 50 como llamamiento para resucitar el uso de sombrero: ¿Por qué salís siempre sin sombrero? Nunca resultaréis verdaderamente elegantes en la calle si no complementáis vuestro conjunto con uno de esos sombreros pequeños que tan bien os sientan.

En los últimos años parece ser que se han obedecido las órdenes de Christian Dior, ya que podemos encontrar cantidad de look masculinos actuales vistiendo este accesorio.

No es necesario tener que llevarlo con traje, también lo podemos combinar con prendas casuales.

Abajo, el hijo del actor Clint Eastwood

El sombrero es un accesorio que aumenta la estatura de quien lo porta, favorece el rostro ya que lo realza y lo encuadra, además de aportar personalidad. Como regla para llevarlo correctamente, el sombrero debe quedar dos dedos por encima de las orejas y seguir un protocolo:

1. Prohibido llevarlo : durante eventos nocturnos, en espectáculos en espacios cerrados, actos religiosos (procesiones, entierros...).
2. Quitarse el sombrero significa una muestra de consideración, por ejemplo para saludar a una persona. También se entiende como un sinónimo de agradecimiento.
3. Desde el punto de vista de la galantería, es incorrecto hablar con una mujer con el sombrero puesto, esto es algo que en la actualidad carece de importancia.

Espero que os haya gustado esta entrada sobre los sombreros y convencido para llevar este invierno este accesorio.